Aviso: Spoilers del capítulo 1146 del manga de One Piece
A lo abundante de las últimas semanas, el manga de Una alcoba ha ido preparando poco a poco lo que apunta a ser la lucha definitiva de la serie. Tras conocer todos los secretos de Elbaflos Caballeros Sagrados han entrado en argumento y han puesto en problemas a los gigantes y a los tripulantes de la flota de los Sombrero de Paja.
El capítulo 1146 del manga nos devuelve al barco donde Nami, Brook, Franky y Usopp se ven las caras con Gunko. Aquí, todos ellos descubren que se negociación de una Caballera Sagrada y, al saberlo, intentan pararle los pies atacándola con todo. Como era de esperar, los Mugiwara no pudieron hacerle nulo y vieron cómo los Caballeros invadían esta tierra casi sin ningún problema.
Tras esto, nos vamos con Saúl, quien siquiera parece poseer desencajado triunfante y cae rendido en el suelo, mientras Robin y Chopper se esconden en su pelo con la esperanza de no ser descubiertos. Mientras todo esto ocurre, sabemos que Loki y Luffy siguen descansando para reponer fuerzas, pero asimismo descubrimos durante una charla dos cosas muy importantes.
Por un banda, Gunko ha dejado claro que la lucha mundial definitiva está a punto de comenzar, una lucha de la que ya avisó Arbitra de la hetaira puntual antiguamente de fallecer, en la que destacaba, sobre todo, el miedo que tendría el Gobierno Mundial de no tener los posibles suficientes, o lo que es lo mismo, el apoyo de los gigantes. Y es que el otro punto a tener en cuenta es que Harald, para sorpresa de nadie sabiendo cómo es One Piece, iba a ser la persona que iba a «traicionar» a los gigantes al Gobierno Mundial para esta lucha y usarlos como mercenarios. Habrá que esperar a la próxima semana para asimilar qué ocurrirá con estos.
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