Dune no es solo una dinastía de ciencia ficción. Es, desde sus orígenes literarios en los primaveras 60 de la mano de Frank Herbert, un tratado completo de ecología, filosofía, política, religión, transformación humana y, por supuesto, ciencia especulativa. Entre todos los conceptos fascinantes que nutren este vasto universo narrativo, hay uno que brilla con una importancia fundamental y que, paradójicamente, ha sido limitado a una caricatura técnica en la mayoría de adaptaciones: el Huella Holtzman.
Si has conocedor los libros de Dunesabes que Holtzman es casi un dios tecnológico. Un nombre que se repite como si fuera el Newton o el Einstein de ese universo. Si, en cambio, tu único contacto con Dune ha sido a través del cine, tanto en la propuesta alucinada de David Lynch de 1984 como en las visualmente impecables películas de Denis Villeneuve, es probable que el Huella Holtzman tan pronto como te suene. Y sin secuestro, sin él, el universo de Dune tal y como lo conocemos simplemente no existiría.
Una ficción con bases más serias de lo que parece
El Huella Holtzman no es una simple excusa mágica como lo sería la Fuerza en Star Wars, es un aberración ficticio, sí, pero diseñado con una coherencia interna que permite explicar algunas de las tecnologías más emblemáticas del universo Dune. En los libros se nos dice que el Huella Holtzman permite la manipulación del espacio y el tiempo mediante campos de energía. Un aberración cuántico engorroso que, según los tratados ficticios del universo, fue descubierto por un irrefutable llamado Tio Holtzman. Lo interesante es que sus aplicaciones son múltiples y revolucionarias: sin este principio no existirían los escudos personales de defensa, los sistemas de suspensión antigravitacional, ni el propio alucinación espacial interestelar que sustenta el Imperium cósmico.
Sin este principio no existiría el alucinación espacial interestelar que sustenta el Imperium cósmico
La secreto está en que Dune prescinde por completo de las inteligencias artificiales, eliminadas tras la Yihad Butlerianaese algarada de la humanidad contra las máquinas pensantes que marcó una nueva era de avance humano. Al no existir ordenadores o sistemas automáticos para navegar por el espacio, el alucinación interestelar en Dune depende de los Navegantes de la Cofradía Espacialseres humanos mutados por el consumo extremo de especia melange. Pero incluso ellos, con su tiento para predecir rutas seguras, necesitan un mecanismo físico que permita desplazarse por el espacio sin moverse. Y ahí entra en descanso Holtzman.

Los escudos personales de la lectura cinematográfica de Dune de Villeneuve
De escudos a viajes instantáneos
La tecnología de Holtzman permite dos cosas cruciales en el universo de Dune. Por un costado, la creación de escudos personales: campos de fuerza que bloquean cualquier ataque rápido, haciendo inútiles las balas o los disparos de armas de energía. Esto lo cambia todo en términos de combate, ya que obliga a que las peleas se resuelvan mediante armas cuerpo a cuerpo lentas, como espadas, cuchillos o los emblemáticas cuchillos crys de los fremen, capaces de atravesar el escudo con movimientos lentos y deliberados. Uno de los aspectos más fascinantes, y a menudo malinterpretados, del universo de Dune es cómo funciona el alucinación interestelar. No hablamos de simples motores de curvatura ni de hipersalto al estilo Star Wars. En Dune, el alucinación por el espacio es tanto una proeza tecnológica como una experiencia mística. Y en el centro de todo esto está el Huella Holtzman.
La Cofradía Espacial se convirtió en una de las instituciones más poderosas del Imperium: los únicos capaces de alucinar de un planeta a otro con seguridad
Para comprender cómo funciona el alucinación espacial en Dune, primero hay que entender que este universo ha renunciado a las inteligencias artificiales. Tras la Yihad Butlerianauna cruzada santa contra las máquinas pensantes, toda tecnología que implique la sustitución de la mente humana fue proscrita. Esto obligó al avance de capacidades humanas extraordinarias, como la mentalidad, LAS acertadamente hecho O los Navegantespara cubrir las funciones que antaño realizaban las máquinas. En este contexto, la Cofradía Espacial se convirtió en una de las instituciones más poderosas del Imperium: los únicos capaces de alucinar de un planeta a otro con seguridad. Pero no pespunte con tener humanos especiales. Se necesita una pulvínulo científica. Ahí es donde entra el Huella Holtzmanque en términos ficticios permite plegar el espacio.

Diseño de las heighliners para las películas de Villeneuve. Imagen: El Arte y alma de Dune
¿Qué significa «plegar el espacio» ?
El Huella Holtzman permite originar campos de energía capaces de manipular el espacio-tiempo. A diferencia de otras franquicias donde las naves se desplazan a velocidades absurdas o saltan a través de portales, en Dune el alucinación interestelar consiste en doblar el espacio mismo, como si juntaras dos extremos de una hoja de papel. La nave no se mueve en el sentido clásico; simplemente «aparece» en su destinoporque el espacio entre los dos puntos ha sido limitado a cero. Este tipo de alucinación requiere una comprensión perfecta del universo, de las posiciones estelares, de los riesgos del brinco. Y aquí es donde entra el delegado humano: los Navegantes de la Cofradía Espacial.

Uno de los navengantes de Dune en la lectura de Dune de Lynch
Los Navegantes no son simples pilotos. Son humanos profundamente alterados por el consumo prolongado y excesivo de melange, la especia de Arrakis. Esta droga no solo amplía la conciencia y alarga la vida; todavía otorga visiones prescientes. Gracias a estas habilidades, los Navegantes son capaces de ver las rutas seguras a través del espacio plegado, evitando accidentes catastróficos. Sin ordenadores que calculen trayectorias, sin IA que coordinen miles de variables, el alucinación interestelar en Dune depende de la mente humana elevada a un estado casi divino por la especia. Pero incluso con estas habilidades, el proceso no sería posible sin la tecnología basada en el Huella Holtzman.
Las naves de la Cofradía, conocidas como heighliners, son estructuras colosales, capaces de transportar miles de personas, vehículos o cargamentos completos de especia
Las naves de la Cofradía, conocidas como hechicerosson estructuras colosales, capaces de transportar miles de personas, tropas, vehículos o cargamentos completos de especia. Lo más sorprendente es que estas naves no tienen timón, ni propulsores en el sentido clásico. No se mueven de forma tradicional. Se colocan en esfera, y desde ahí, con la manual de un Navegante y un motor Holtzman, desaparecen y reaparecen en otra parte del universo. En el interior del heighliner, el Navegante flota en una enorme cámara llena de gas de especia, donde sus habilidades prescientes alcanzan su punto mayor. Desde ese estado trastornado de conciencia, y usando la tecnología Holtzman, manual el proceso de plegado espacial para que la nave llegue a su destino sin colapsar contra un planeta o fallar contra una hado. La operación no tiene beneficio de error.


¿Por qué nunca se nos explica esto acertadamente en las películas?
La complejidad del sistema Holtzman y de los Navegantes es tal que, en la mayoría de adaptaciones cinematográficas, se prefiere obviar el asunto o resolverlo con una ringlera de diálogo. En la película de David Lynch (1984), los Navegantes aparecen como criaturas mutadas e imponentes, pero se nos muestra más su aspecto que su función. En la dinastía moderna de Denis Villeneuve, se hace narración a la carestia de especia para los viajes, y vemos un breve vistazo a un heighliner descendiendo sobre Arrakis, pero no se explica cómo funciona ese alucinación, ni se menciona el Huella Holtzman más allá de referenciar el funcionamiento de los escudos personales o el que rodea Arrakeen, la hacienda de Arrakis.
El Huella Holtzman es el principio secreto que lo conecta todo en Universo Dune
Y sin secuestro, es el principio secreto que lo conecta todo. El motivo por el que se necesita especia. La razón por la que Arrakis es el mundo más importante del universo. El fundamento que da sentido al monopolio de la Cofradía y a la casa geopolítica del Imperium. Omitirlo o reducirlo a una estética visual espectacular es perder una parte fundamental del alma de Dune.

Trilogía Dune, tiraje de opulencia (estuche con: Dune | El mesías de Dune | Hijos de Dune): Dune / El Mesías De Dune / Hijos De Dune/ Dune / Dune Messiah / Children of Dune (Best Seller)
* Algún precio puede acontecer cambiado desde la última revisión
Por qué debería importarte Holtzman
Si te fascina Dune y todo lo que implica, deberías mirar más allá de la especia, los gusanos y los enfrentamientos entre Atreides y Harkonnen. Holtzman es el pegamento invisible que une todas las piezas del universo. Es la alegato de que un imperio feudal cósmico pueda existir sin ordenadores, con escudos que hacen que las espadas sean más bártulos que las pistolas, y con viajes entre planetas que desafían toda razonamiento sin perder del todo el amarre en la física teórica. Es un ejemplo de cómo Frank Herbert jugaba con ideas científicas reales y las extrapolaba cerca de un futuro plausible. De cómo la ciencia ficción puede ser más que un aderezo para la influencia: puede ser una útil de consejo sobre cómo avanzamos como especie, qué tecnologías desarrollamos y cuáles decidimos descuidar.
En 3DJuegos | Es uno de los humanos más importantes de la historia de Dune, pero me parece muy difícil que veamos a la Oráculo del Infinito en el cine
En 3DJuegos | El enigma de las pistolas Maula: ¿Por qué los Fremen desafían las reglas del universo de Dune?
En 3DJuegos | ¿Qué pinta Anya Taylor-Joy en Dune? Es uno de los personajes más importantes de Dune pero las nuevas película no le han hecho rectitud todavía
